"Toda persona nacida o naturalizada en los Estados Unidos, y sujeta por ello a tal jurisdicción, es ciudadana de los Estados Unidos y del Estado en que resida. Ningún Estado podrá crear o implementar leyes que limiten los privilegios o inmunidades de los ciudadanos de los Estados Unidos; tampoco podrá ningún Estado privar a una persona de su vida, libertad o propiedad, sin un debido proceso legal; ni negar a persona alguna dentro de su jurisdicción la protección legal igualitaria".
La enmienda catorce de la Constitución de Estados Unidos está ahora amenazada por los cálculos electoralistas de los republicanos en plena lucha electoral. El senador republicano Lindsey Graham prendió la mecha con la propuesta de revisar el derecho. Según Graham, no debería aplicarse la ciudadanía a los hijos nacidos en EEUU de padres inmigrantes sin papeles. La propuesta ha recibido rápidamente el apoyo de otros republicanos, como el líder del partido en el Senado, Mitch McConnell.